Hoy dejo de lado los temas de política y políticos, a pesar de ser un asunto que en estos momentos, y prácticamente en todos, es candente. Esta vez voy abordar sobre una situación que sucede en el transporte público de la Zona Metropolitana de Guadalajara, la implementación de un programa de espacios exclusivos para mujeres en los autobuses, tren ligero y macrobús.
Esta medida se realiza con la finalidad de proteger a las féminas del abuso al que constantemente son sometidas por los hombres. Hay que señalar que según una encuesta el 73% de las mujeres que abordan el transporte público han sido víctima de una agresión de carácter sexual, ya sea por miradas lascivas, piropos, los famosos "repegones" e incluso violaciones.
A raíz de esta problemática el gobierno del estado implemento este programa donde se adaptan espacios exclusivos para las mujeres en el tren ligero, macrobús y autobuses. Incluso existe un programa piloto en la ruta 380, el cual consiste en tener minibuses completamente exclusivos para las damas.
Por un lado esta medida me parece inequitativa y discriminatoria. En el siglo 21 no se puede hablar de equidad de género si se sigue con este tipo de prácticas de segmentación. Pero por el otro, y creo que es el punto más importante, creo que es culpa de nosotros los varones. Sí es nuestra culpa. ¿Por qué?, simplemente por pasados de listos con ellas, por perder la caballerosidad ¡vaya!
Si realmente nosotros como hombres fuéramos más civilizados y respetuosos, este tipo de programas para proteger a las mujeres de los abusos de los hombres no serían necesarios. No cuesta nada respetar a todas las personas, en especial a las damas. Recordemos que todos venimos al mundo gracias a una mujer.
El implementar zonas exclusivas para las mujeres en el transporte público, me parece una medida, desgraciadamente, necesaria para la protección de las féminas y de paso educarnos a los hombres para tratarlas bien, como se debe.
A mí siempre me ha gustado apoyar los ideales de equidad de género, a lo largo de mi vida he conocido a mujeres muy inteligentes, valiosas y capaces de salir adelante por sí solas. Por eso debemos fomentar una sana convivencia entre hombres y mujeres, vivimos en el siglo 21 y desgraciadamente parece que lo hacemos en la edad de piedra por la forma como se segmenta el uso del transporte público. Pero es culpa de los hombres, aunque no son todos, por no saber respetar. Todo sea por la sana convivencia y el desarrollo de la sociedad.
¡Ah por cierto!, a mí sí me gustaría ver a una presidenta en México, pero ese es otro tema.
Hasta la Próxima. 
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