jueves, 13 de mayo de 2010

México, donde todo sucede al revés

Lamentablemente vivimos en el México donde impera la ley del "Que no tranza, no avanza", donde al parecer todo sucede al revés. La anterior afirmación la digo porque una persona que siempre dice la verdad, que siempre realiza todos sus trámites en regla, que siempre se maneja con el valor de la honestidad; en síntesis cualquier gente que quiera ser "derecho", la mayoría de las veces tiene mucho más obstáculos que quienes todo lo arreglan por "debajo del agua".


Ejemplos, tenemos muchos. Este es un fenómeno que se da en todo nivel y clase social. Sencillamente aquellas personas que se meten a la fila del cine, las tortillas o circula en sentido contrario. Es un acto que se oye simple, pero que sin duda demuestra la falta de orden y respeto hacia los demás. ¿Qué gana esa persona?¿Por qué lo hace? la simple justificación del "traigo prisa" ya no es válida, en el mundo actual al ritmo que trabajamos "todos tenemos prisa", ¿Por qué no lo comprenden estos "gandallas"?.


Toda aquella persona que alguna vez se ha aprovechado de la situación y hace un acto indebido, como el que mencioné en el párrafo anterior, estoy seguro que no le gustaría que le hicieran lo mismo a él.


¿Y qué pasa cuando alguien quiere tramitar algún documento en la oficina de gobierno correspondiente?. Pasa de todo, menos que te resuelvan a tiempo y como debe de ser. Primero que pase a esta oficina a pedir informes; enseguida pase al cubículo que le corresponde para llenar un formato; luego que vaya a que le sellen su documento; después vaya a tomarse la foto; no se preocupe sólo falta su firma; muy bien ahora sólo pase a hacer el pago correspondiente; un momento por favor, su trámite no puede ser atendido porque le hace falta un documento; vuelva mañana. Es una eternidad cuando quieres hacer las cosas "bien, como se debe", un peregrinar que pasan todos aquellos que confían en la buena voluntad de las personas.


En cambio, si quieres que "todo salga bien" no te preocupes, ve con un "coyote" o suelta una lana y en menos de 15 minutos tienes lo que buscas. Y todavía los s muy cínicos dizque se protegen en el "muy bien joven ya nos estamos entendiendo". Al carajo, no nos estamos entendiendo, sólo te estás aprovechando de mi situación.


Se estima que al año los mexicanos gastan alrededor de 20 mil millones de pesos en "mordidas", un dineral. Para que se den una idea, la cifra equivale al presupuesto de la UNAM para el año 2010, sí, el presupuesto para la máxima casa de estudios de este país, la mejor universidad de Latinoamérica.


Lo peor de todo que la persona que en momento dado quiere denunciar todo tipo de abusos, o que simplemente cuestiona un acto incorrecto. Fácil, hay que negarlo o hay que sacarlo del sistema, "porque no entiende cómo funcionan las cosas aquí". En fin, le hacen la vida imposible sólo por tratar de ser "derecho". Por eso digo que México es el país donde todo sucede al revés.


Mientras las cosas sigan así, el ansiado desarrollo de México no se logrará.




Hasta la próxima


miércoles, 5 de mayo de 2010

"Competentes" por dedazo

En México abundan los "chapulines", pero no de esos que saltan por los jardines, me refiero a los grillos que viven de la política. Sí. Aquellos que saltan de un puesto a otro cada uno, tres o seis años. Por lo visto estos funcionarios "saben de todo", pero en realidad viven en la ignorancia, mejor dicho, ¡son una bola de sin vergüenzas".

¿Cómo es posible que un servidor público salte de un puesto a otro sin dominar las funciones técnicas del cargo que ostentan? Esto lo cuestiono porque me cuesta trabajo creer que la administración pública de nuestro país viva en un contexto de desorganización y falta de especialización en los puestos de trabajo.

Es lamentable que un X o Y funcionario se desempeñe durante un período en cierta área o dependencia de gobierno y para la siguiente administración ocupe un cargo completamente distinto. Es más, en la mayoría de las ocasiones su formación académica no coincide con el perfil profesional de la dependencia.

Así, podemos ver que el funcionario un día es encargado del Medio Ambiente; en otro, se encargan de la Vialidad y el Transporte; para el siguiente, son la cabeza de la Seguridad Pública; luego, son Secretarios de Salud; y así se la llevan. De un lado a otro sin dominar el campo en el que se desempeñan. En pocas palabras: le hacen al "mil usos". Ellos, "todo pueden", "todo saben", "todo dominan", lo únicos conceptos que desconocen son la honestidad, la responsabilidad y la ética en el trabajo.

La principal causa de esta falta de identidad en los puestos de gobierno es el "compadrazgo". El pago de favores. No es posible que una persona ocupe un cargo público sólo porque es amigo del político o porque apoyo al líder durante la campaña. Incluso existen funcionarios que descaradamente aceptan el desconocer los conceptos y técnicas mínimas para la administración del área en la que se desempeñará.

Lo peor es que el involucrado se justifica con la trillada frase de: "aquella persona que se supera es la que aprende algo nuevo a diario. Yo estoy dispuesto a aprender lo más rápido posible para ayudar a la ciudadanía", ¡patrañas!. Ni está dispuesto a aprender y mucho menos está dispuesto a ayudar al pueblo.

Ocupar un cargo público es un compromiso que los políticos deben asumir con profesionalismo. Debe conocer perfectamente el campo y no ser unos improvisados que aprenden sobre la marcha. Estoy consciente de que las personas, de todos los ámbitos, deben afinar todos los errores que a diario se tienen en el trabajo, pero debe ser lo mínimo. Es importante tener las bases bien sustentadas para desempeñarse en esa labor, ya luego se aprenderán los pequeños detalles.

No me puedo imaginar a una persona que esté buscando trabajo y en una entrevista diga al reclutador: "la verdad no sé nada sobre el puesto, pero si me contrata aprenderé sobre la marcha". Lo más seguro es que será rechazado.

Para lograr el tan ansiado crecimiento del país es necesario que el sistema político comience por tener especialistas en cada área. Personas que conozcan bien su puesto y que trabajen con lealtad.


Hasta la Próxima